Por: Adel Lopez Montilla
Con este articulo no quiero dar a entender que me alegra que al alcalde de Montería le vaya mal, por el contrario, quiero hacerle ver que en un experimento de cuatro años llamado “Ahora le toca a la gente” en sus dos primeros años o primer tiempo el juego va perdido y sin un norte claro que nos ilusione a pensar que puede existir una remontada.
Somos conscientes que la pandemia dificultó mucho el desarrollo libre de sus propuestas, pero un jugador lesionado no debe ser motivo para que todo un equipo no este a la altura de una campaña que generó muchas expectativas. Si no se podía en el desarrollo de obras por lo menos debió sobrarse en el ámbito social y eso tampoco se ha dado en la administración de Carlos Ordosgoitia.
Ya lo habíamos anunciado en un articulo en el que hacíamos referencia que la administración difícilmente en dos años que le quedan podía cumplir con lo prometido. Hasta el momento no hay nada que mostrar diferente a los planos y anuncios cargados de mucho marketing publicitario.
La vara dejada por la administración anterior fue muy alta, pero eso no quiere decir que la actual tenga que irse con una marca muy baja, eso es lo que hasta el momento vemos y palpamos dependiendo de las obras que se vayan ejecutando y podamos verificar.
Nos preocupa observar que de la Universidad del Sur no hay nada diferente a un lote solo lleno de maleza que solo sirve de guarida para la delincuencia ya que no tiene vigilantes, también es un basurero a cielo abierto, del tercer puente que comunicaría a la margen izquierda a la altura de la Urbanización Vallejo con la margen derecha a la altura del barrio Brisas del Sinú tampoco hay nada solo un plano o maqueta de los que puede ser ¿Cuándo? Eso no lo sabemos y que decir de la culminación de la Ronda de la Margen Izquierda a la cual también solo se le conoce la intención de hacer, pero las acciones no se ven.
Las obras que medio se visionan y que son las únicas que hasta el momento se pueden entregar son la Villa Olímpica de la Margen Izquierda y Businú que marcha a ritmo muy lento, de los prestamos que anunciaban la terminación del Gota a Gota nada que decir, del mejoramiento de la calidad de vida de los mototaxis si que menos. Esto no lo decimos nosotros lo dice la gente en los barrios quienes dicen va por la mitad y esto no mejora.
De la reactivación económica solo se puede decir que sobrevivieron los mas fuertes ya que muchos quebraron y no era suficiente con decir se puede abrir el comercio sin una ayuda económica para arrancar, basta con mirar el sin número de locales comerciales con los letreros de se arrienda para saber que la quiebra estuvo a la vista de todos.
En temas de salud mental rajado completamente hasta la fecha de hoy no sabemos si ya fue radicado el documento de política pública ante el Concejo de Montería.
En fin, al alcalde de Montería le quedan dos años los cuales le deseamos una pronta recuperación, el partido va perdido y por goleada y si no cambia su nomina e invierte en su gente y ciudad, puede pasar a la historia como uno de los alcaldes que pasaron por la capital ganadera sin pena ni gloria.
Nota: para resaltar el manejo que se le dio a la pandemia en sus dos años con el tema del hospital de campaña Miguel Happy Lora y la apertura del estadio de beisbol 18 de junio para la vacunación.